miércoles, 21 de octubre de 2015

TORREVIEJA: Paseo, Pipas, Playa …y PESCA

     
            Dedicado a los enamorados del mar, de la pesca y de TORREVIEJA. Y por supuesto, a todos aquellos periodistas que ejercen su profesión desde el más absoluto respeto a la verdad y a la sensibilidad de las personas...


       Hace escasas fechas, un malintencionado periodista de un diario de tirada nacional aprovechaba que "el Pisuerga pasa por Valladolid", o mejor dicho, que dos jóvenes en pleno "apretón" sexual se detenían en la fuente de la torrevejense "Plaza Waldo Calero" a dar rienda suelta a su pasión, para desacreditar el nombre de este turístico y salinero municipio, hoy quinto en población de la Comunidad Valenciana. El artículo en cuestión fue publicado con el apocalíptico título “Sexo y ladrillos en Torrevieja: lo que queda en la ciudad más pobre de España”.

       Y no es que me parezca bien la “actuación” de la libidinosa pareja, pero no deja de ser una anécdota en el seno de una “cálida” noche de verano, un hecho puntual que se produce en muchos lugares y playas de nuestra geografía (sobre todo en verano), sin que por ello se pueda poner la etiqueta de municipio “cutre” o “sin ley”, allá donde tenga lugar, ni mucho menos que tan desvergonzado hecho se pueda asociar a un problema social tan serio como los desahucios. 

     El “habilidoso" periodista, aprovechaba el sonado y tórrido “affaire” de la susodicha pareja como hilo conductor de su reportaje (el sexo siempre vende…), para mostrar a sus lectores una TORREVIEJA como la ciudad más pobre de España, conclusión basada en unas estadísticas y parámetros que –cuando menos- son subjetivos y bastante discutibles. La Estadística se ocupa de la recolección, agrupación, presentación, análisis e interpretación de datos. A menudo se llaman estadísticas a las listas de estos datos, cosa que crea una cierta ambigüedad, que no debería provocar confusiones. Así pues, la Estadística no son sólo los resultados de encuestas, ni el cálculo de unos porcentajes, sino que es un método científico que pretende sacar conclusiones a partir de unas observaciones hechas. No obstante, en muchas ocasiones es muy fácil manipularla y escoger los datos que nos interesan para demostrar –de forma totalmente parcial- los hechos o realidades que interesan a cada cual, como sucede en este caso .

        Y no es que ahora pretenda negar algunas evidencias  y problemas estructurales que padece nuestro pueblo-ciudad, pero de ahí a asumir y dar como cierta la realidad que pretende mostrar al mundo el periodista, va un buen trecho. Decía el filósofo A. Schopenhauer que “El destino mezcla las cartas, y nosotros las jugamos”. Tal vez Torrevieja, en algunos momentos claves de su historia reciente haya jugado unas cartas que venían barajadas de forma caótica, sin que fuera posible sacar de ahí jugadas ganadoras. Pero ahí está, jugando todavía la partida; y en otros momentos ha sabido resarcirse de los errores del pasado, cambiando dinámicas y apostando por aquello en lo que creía. Porque es difícil determinar o predecir si en muchos momentos esas cartas eran ganadoras o llevaban a la bancarrota. De ser así, la historia de la humanidad no hubiera sido tan compleja…

         
        Desde hace mucho tiempo, yo diría que de forma mas bien despectiva, se ha venido asociando la imagen turística de Torrevieja a “LAS TRES PES: PASEO, PIPAS y PLAYAS", en clara referencia a elementos cuyo disfrute no requiere de una gran inversión a sus usuarios, y que -a la sazón- vienen a asociarse al turismo de bajo nivel adquisitivo procedente de los "barrios bajos" de Madrid, jubilados con pagas de ínfima cuantía de toda la geografía nacional, y extranjeros -comunitarios y no comunitarios- que distan mucho de aunar los requisitos de aquellos “primeros colonizadores” escandinavos que aterrizaron en estas tierras allá por los años sesenta, con una aureola de glamour y cierto poderío económico, que promovieron urbanizaciones –entonces aisladas del mundanal ruido- como “Lomas del Mar” (más conocida por "Los suecos"). Vaya por delante que esos “jubilados”, que el periodista nombra en tono despectivo en su artículo, son en muchos casos el pilar económico de bastantes familias de clase humilde, que en estos tiempos difíciles no cuentan con fuentes de ingresos por estar en el paro. Y que como en todas las ciudades, se ven en la obligación de residir en barrios periféricos  de arquitecturas mucho más modestas. Y que no por ello las ciudades que los albergan son menos que otras ni esos individuos merecen que se les pierda el respeto, sea cual sea la proporción con la que se computen en el padrón municipal.

        En el caso de  TORREVIEJA, si bien es cierto que ofrece muchas posibilidades (oferta inmobiliaria, de ocio, etc) a bajo costo, es mucho más que eso. Por ello quiero añadir un cuarto elemento, una cuarta “P” (la PESCA) que –a modo de ejemplo- no es más que otra prueba –entre otras tantas- que viene a demostrar que Torrevieja es mucho más que ese “cutrerío”, que algunos han pretendido enarbolar como estandarte del municipio. 
       
Imagen actual del "Paseo del Faro", en el que se suelen
 congregar bastantes pescadores.


       Si bien, esta actividad y afición es bastante desconocida para gran parte de la población, excepto –claro está- aquellos que viven de ella, la practican como afición o conviven en mayor o menor grado con personas cuyo hobbie sea la pesca deportiva.
       
     Podría extenderme mucho hablando de las virtudes de este pueblo pesquero y salinero –ahora convertido en municipio de gran población-, en su bonita fachada costera, sus tradiciones marineras (fiesta de la Virgen del Carmen, Certamen de Habaneras,etc), pero quiero incidir especialmente en su vinculación indisoluble con el mar, y más concretamente con esta actividad que más allá de ser un medio de vida para algunas familias, se ha ido convirtiendo en una gran pasión para muchas personas –entre las que me incluyo-, que en muchos casos trasciende de ser una mera afición por el tiempo, el dinero, el esfuerzo y la ilusión que invertimos en ella.  

        Y es que, para los que no lo sepan –o no les convenga saberlo-, en TORREVIEJA, además de contar con una de las flotas profesionales de cerco más importantes del levante español, a buen seguro que se produce una de las mayores concentraciones de embarcaciones deportivas enfocadas a la pesca del litoral Mediterráneo. En la dársena de Torrevieja se erigen –nada mas y nada menos- que cuatro Puertos Deportivos, computando un total de mas de 2000 barcos –y éste sí es un dato fácilmente contrastable-, de los que buena parte -bien de forma habitual, bien ocasional- practican la pesca deportiva en alguna de sus modalidades
   
Imagen actual del Puerto de Torrevieja, con más de 2000 embarcaciones deportivas, repartidas en 4 puertos deportivos.
  


    Tal vez al malicioso periodista se le olvidó dar una vuelta por nuestra envidiable y remozada bahía antes de "vomitar" su artículo. A mayor abundamiento, ¡que coño!, entre algunos de esos barcos se encuentran veleros de gran eslora propiedad de grandes empresarios de escala mundial, o de reputados periodistas como el Sr. Pérez Reverte, del que debería tomar ejemplo, por cuanto los datos que aporta en sus artículos suelen estar muy bien contrastados, o cuando se trata de opinar, dice lo que le pasa por los cojones (¡¡porque lo vale!!, como la chica del spot de L’Oreal), y no lo que le exige su editorial para "vender papel".
 
Uno de los grandes veleros que tiene su puerto-base en Torrevieja.


      Volviendo a la pesca, no solo deberíamos incidir en la cantidad de aficionados, sino que el aspecto cualitativo es –si cabe- mucho más destacable. Así pues, desde nuestros pantalanes salen habitualmente a la mar un buen puñado de pescadores deportivos laureados en competiciones nacionales e internacionales, hasta el punto que podemos enorgullecernos de contar con 3 Campeones del Mundo, Campeones Nacionales y Autonómicos, en la modalidad de embarcación fondeada, sin duda la más deportiva y practicada en esta localidad y en esta zona en general.

      Y ya que hablamos de organizar eventos, no me voy a quedar sin hacer especial mención de todas aquellas actividades deportivas o extradeportivas que se organizan en esta localidad relacionadas con el mar. Para los que no lo sepan, y sigan pensando que en Torrevieja se puede hacer poco más que bajar a alguna de sus playas o dar un paseo por los “hippies”, Torrevieja organiza con frecuencia Regatas de Vela y  Remo de gran prestigio con rango de campeonato nacional, contando entre sus filas con deportistas de gran nivel formados en sus escuelas, que han sido Campeones de España y participado en grandes eventos de índole Internacional. 

      Y por supuesto, en relación a LA PESCA viene siendo sede de importantes concursos de carácter nacional e internacional que congregan a los mejores pescadores nacionales en embarcación fondeada, y la "flor y nata" de pescadores procedentes de países ribereños Europeos como Italia, Francia, Portugal, o Inglaterra entre otros. Además de los habituales concursos provinciales, autonómicos o nacionales que se celebran con relativa frecuencia en esta ciudad, en los últimos años han cobrado mucho prestigio el Open Internacional “La Purísima” (organizado por el R.C.N.T) y el “Open Internacional Colmic” (organizado por el Club Marina Internacional), en la modalidad de pesca por dúos, cuyo nivel organizativo y competitivo hace que cada vez sean más los participantes que se den cita en los mismos. Tal vez no sea tan fea ni se esté tan mal en Torrevieja, cuando año tras año muchos deportistas están dispuestos a coger un avión para acudir a la cita (en muchos casos costeándoselo ellos mismos).

Pescadores desembarcando en un concurso oficial en el R.C.N.T.

       Pero no solo en la modalidad de pesca en embarcación fondeada, Torrevieja es capaz de organizar importantes concursos. También ha sido sede de destacadas competiciones en la modalidad de Curricán. Sin ir más lejos, el día 25 de Octubre se celebrará la IX COPA DE ESPAÑA DE CURRICAN COSTERO, organizado por el Club Marina Internacional, que a buen seguro será un éxito de participación (y ojalá también de capturas), pues se celebra en fechas en las que es posible realizar cuantiosas pesqueras y de buen tamaño en esta modalidad accesible a casi cualquier embarcación.

Uno de los concursos de pesca con rango de competición nacional
que tendrá lugar en Torrevieja el día 25 de octubre, organizado por
MARINA INTERNACIONAL.

      Por cierto, si es que el “periodista” que escribió el aberrante artículo llegara a leer estas líneas, que no dude en ponerse en contacto conmigo. Le facilitaría el teléfono de una de las grandes inmobiliarias que operan en esta ciudad, que sin lugar a dudas vendería en un santiamén el piso que su amigo el de Pozuelo lleva intentando vender desde hace meses. Casualmente, uno de los socios de la inmobiliaria de la que hablo se dedica en sus ratos libres a gestionar altruístamente la Vocalía de Pesca del Club que organiza el concurso mencionado. Y al parecer no le debe ir mal vendiendo pisos en esta “Pompeya” del siglo XXI, porque se da el “capricho” de disfrutar de un barco de 10 m, que difícilmente podría permitirse algún día el “periodista” si sigue escribiendo artículos con tan poca base documental, y apoyados en tanta frivolidad…

     Y ya que hablamos de pesca, de costas y de relaciones con el mar. Sin lugar a dudas las costas cercanas al ámbito geográfico de Torrevieja, además de su valor paisajístico son propicias para la pesca –ya sea al curricán o a fondo-, produciéndose además una curiosa “simetría” en dirección norte-sur, en la que nos vamos encontrando accidentes naturales o artificiales que favorecen la concentración de peces pelágicos, susceptibles de ser capturados al CURRICÁN. 


      Si decidimos navegar hacia el norte nos encontraremos a escasas tres millas con el Cabo Cervera, o con Cabo Roig si lo hacemos hacia el sur. Si seguimos unas cuatro o cinco millas más llegaremos a las piscifactorías de Guardamar (al norte) o de San Pedro del Pinatar (al sur), estructuras flotantes en cuyas inmediaciones es fácil encontrar grandes concentraciones de pelágicos como bacoretas, bonitos, llampugas o seriolas. Y si seguimos navegando unas cuatro o cinco millas más llegaremos a las inmediaciones de la Isla de Tabarca (al norte) o a la zona de las Islas Grosa y de la Hormiga (frente a Cabo de Palos), lugares con la categoría de Reserva Marina, de singular valor paisajístico, alrededor de las cuales se suelen congregar grandes bancos de peces, especialmente en las fechas que nos encontramos. Y todo esto acotado al este (mar adentro) por dos grandes barras rocosas situadas en paralelo a las costas denominadas “el Carrilón” y la “Segunda Cordillera” en cuyas verticales se produce una interesante cadena trófica que asegura casi siempre buenas capturas. 

     Si el crítico-periodista hubiera realizado su trayecto hacia Torrevieja por las rutas marítimas mencionadas (en lugar de los que describe en su artículo, más próximos a los de la peli “28 días después”), a bordo de la embarcación de cualquier buen aficionado (o de las que parten día tras día a llevar turistas a alguna de las islas aludidas) el resultado de su gravoso artículo hubiera sido otro. Y no te digo ya, si alguna de las capturas obtenidas hubiera sido cocinada –para deleite de su paladar- en alguno de los restaurantes punteros de esta localidad, que –aunque sea difícil de creer para el periodista en cuestión- funcionan también –si cabe mejor- en épocas diferentes a la estival, hecho del que muy pocos municipios costeros podrían vanagloriarse. 

      También me gustaría decirle que no debería preocuparse si se sintiera indispuesto porque algo le sentara mal, o cualquier contingencia que pudiera sucederle en su estancia en Torrevieja, puesto que aquí existen buenas y suficientes farmacias en las que podrá encontrar todo aquello que necesite. Además, puedo afirmar que tengo amistad con varios de los farmacéuticos que regentan conocidas farmacias del centro de la ciudad, y doy fe de que  funcionan de maravilla (y lo digo desde la objetividad). Desconozco cuál será la situación de Pozuelo, pero casi con toda seguridad, la más prestigiosa de allí no me cabe duda de que envidiaría las dotaciones y el nivel de muchas de las de aquí, pues en algunos casos, además de productos farmacéuticos cuentan con ortopedia, óptica y gabinete de estética, además de un personal amplio y cualificado ("indigno" de un pueblo tan "destartalado" como éste a los ojos del periodista)...

   Y puesto que es muy dado a pervertir la realidad a su antojo, también podría facilitarle el teléfono de otro amigo y paisano, caricaturista de gran prestigio (y en sus tiempos también tertuliano de radio en programas nacionales), que desde hace bastantes años vive en Torrevieja. Tal vez, este señor podría darle algunos consejos al "periodista" de cómo distorsionar la realidad con bastante más arte, y sin herir sensibilidades. O quizá le regalaría uno de sus cuadros o retratos de factura personal con cualquier escena marinera típica de Torrevieja. Aunque mas bien sospecho, que dado el sentido del humor que le caracteriza, pintaría el famoso banco de la "Plaza Waldo Calero", con los dos jovenes "en acción", para regalárselo y que no tuviera que volver más a este pueblo a buscar más "carnaza"...
      

     En estos momentos me viene a la memoria el gran ANDRÉS MONTES (periodista deportivo ya fallecido), que apodaba con gran facilidad –y en tono jocoso- a los jugadores de baloncesto. En concreto, me hacía mucha gracia el alias con el que denominaba a NENAD KRISTIC, un pívot serbio de apariencia tosca, que pasaba totalmente desapercibido, pero acababa los partidos con un buen puñado de puntos, rebotes y tapones, y siendo el mejor de su equipo con frecuencia. Lo llamaba “A LA CHITA CALLANDO”. Pues de una u otra forma, yo establecería ese símil entre ese jugador y este pueblo, que poco a poco ha ido creciendo y mejorando las condiciones de vida, para sus habitantes y el turismo en general, aun cuando su “mala fama” en muchos  aspectos y algunas de sus características no son –al menos en teoría- el paradigma de ciudad que diseñaría un buen equipo de urbanistas-sociólogos, como tampoco KRISTIC tenía la apariencia ni el estilo de los baloncestistas más virtuosos.

       Pues eso, que “a la chita callando”, Torrevieja seguirá organizando uno de los certámenes de música polifónica más importantes a nivel Internacional, seguirá trabajando para que sus ciudadanos y visitantes disfruten de sus parques naturales y sus salinas –desde ahora abiertas también al turismo-, seguirá desarrollando y mejorando su bonita fachada marítima, siendo punto de parada de cruceros, o de cargueros que vienen a llenar sus bodegas de sal, o desarrollando instalaciones deportivas y escuelas municipales ejemplares. Y por supuesto seguirá siendo el foco de ilusión de muchos veraneantes con presupuestos ajustados, sin tener que renunciar por ello a una atractiva oferta de actividades náuticas, comerciales y/o de ocio, y playas con distintivos de calidad, pese a quien pese…

Cable-sky situado en el Puerto. Al fondo, embarcaciones deportivas...

      Para los que no me conozcáis, y antes de finalizar este humilde artículo, me gustaría aclarar que el que suscribe no es oriundo de Torrevieja, aunque vive y trabaja aquí desde hace unos cuantos años. Y desde que tiene uso de razón lleva viniendo a veranear y pasar largas temporadas a este pueblo, del que siempre estuvo enamorado, por el mar y sus costas, sus gentes, y las vivencias que a él asocio. Como decía en su página de facebook un conocido fotógrafo local –que tampoco es natural de aquí-: “Por eso y solo por eso merece la pena defender a Torrevieja, como si fuera nuestra novia, … que ya se sabe una novia, podrá tener muchos defectos, pero solo vemos sus virtudes, … el amor tiene eso … y yo AMO A TORREVIEJA”. Amigo Fernando, que sepas que comparto plenamente tus sentimientos hacia este pueblo, por mucho que alguien pretenda vapulearlo y desacreditarlo…

    Aclarado ésto, quiero decir con la cabeza muy alta que soy de Orihuela. Esa ciudad a la que el pernicioso periodista alude cuando nombra el centro comercial de “la Zenia” (emplazado en su término municipal), como si hubiera absorbido todo el poder de influencia que pudiera tener Torrevieja. Hasta en eso es extremadamente torpe el periodista de “El Mundo”, pues parece ignorar que históricamente Orihuela ha sido -y es- la capital de la comarca de la Vega Baja. No obstante, desde hace bastantes años, esa capitalidad es compartida de forma bicefálica con Torrevieja, por razón de lo que ésta ha evolucionado en las últimas décadas económica, social y demográficamente. Y que son ciudades de coyunturas tan diferentes que no se pueden ni deben comparar. Y que más bien yo diría que se complementan la una a la otra, y que la una tiene cosas que le faltan a la otra y viceversa. Y que esto lo digo desde el  amor a mi pueblo natal, al que sigo estrechamente vinculado – a pesar de no residir allí- porque en él tengo mís raíces, mi familia y muchos amigos. Y como decía el gran Alejandro Sanz en su archiconocida canción “yo tengo el CORAZÓN PARTÍO”…

     Y para terminar recomendaría al incendiario periodista, que la próxima vez que vuelva por aquí –si es que alguna vez osa hacerlo-, no deje de buscar a alguien que lo lleve a pescar (yo mismo lo haría encantado), para poder contemplar la realidad de esta tierra y sus paisajes desde otro punto de vista. Y si en su erudición pretende deleitarse con cosas más culturales, que no dude en asistir a las Habaneras, o a uno de los múltiples conciertos que se celebran en Torrevieja. Y si no queda satisfecho, que se acerque a Orihuela a  visitar su casco histórico –tanto mejor si lo hace en plena Semana Santa, declarada de Interés Turístico Internacional-. O que se embarque para ver en todo su esplendor la procesión de la Virgen del Carmen. Y si estas fiestas tan religiosas no son de su gusto, pues que contemple los magníficos carnavales que tienen lugar en Torrevieja desde hace unos años, que haga la conocida "Ruta de las Tapas", o acuda a las Fiestas de la Reconquista de Orihuela.

Barco de cerco durante la procesión de la
 Virgen del Carmen. (Foto de Rebollo).

    Seguro que su visión “Chernobiliano-apocalíptica” de nuestra zona cambia bastante a poco que siguiera estos simples consejos. Y sí, no voy a negar que echando un "vistazo" –con el Google Maps-  por Pozuelo (la ciudad antagónica de Torrevieja en el dichoso estudio y artículo) no tenga arquitecturas y edificaciones de mayor academicismo y homogeneidad –y que muchas podrían ser portada de revistas de arquitectura-, o que su diseño urbanístico no responda a parámetros y estándares más coherentes y ajustados con la legislación y el urbanismo moderno. Pero eso sí, ni "harto de vino" cambiaría “a pelo” una vivienda de aquí por otra de allá. Las razones son muy simples: aunque sea un amante de la buena arquitectura y de las ciudades bien planificadas, no me gusta la impersonalidad del día a día de una ciudad-dormitorio, o tener que ir a trabajar en bus a la capital, entre otros motivos (en esta zona gozamos de lo que en términos urbanísticos viene a denominarse “policentrismo”, y Torrevieja es un importante punto de referencia territorial). Además, yo soy más del “cuñao” o del “primo, dame un sigarro”, aunque el grado de parentesco o consanguinidad con el interlocutor sea nulo. Y por supuesto, ¡qué demonios!.. para un enamorado de "la mar" y la pesca como yo, sería muy difícil adaptarme, pues me sentiría como el cantante de aquella famosa copla ochentera (creo recordar que la cantaban “Los Refrescos”) que decía algo así como: ¡¡…pero al llegar agosto vaya vaya,…aquí no hay playa!!...
  
      
      

      
      

     



     

       
      

        



        


    
     



1 comentario:

  1. Una de las mejores playas torrevejenses es increible perfecta para pasarsela en familia y disfrutar un buen fin de semana una experiencia recomendada a cualquiera

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